Por petición de
nuestros lectores, en esta ocasión analizaremos algunos datos históricos que se
han mitificado con el paso de los años en Colombia y revelaremos con la ayuda
de Néstor Cardozo, historiador de la Universidad Nacional de Colombia, lo que
hay tras algunas afirmaciones que se han popularizado entre los ciudadanos con
el transcurso de los años.
Pregunta 1:
¿Realmente Policarpa Salavarrieta (La Pola) tuvo alguna relación con el consumo
de cerveza?
Seguro más de una vez
ha escuchado a alguien decir 'la Pola' cuando se refiere a una cerveza en
Colombia, la bebida alcohólica más consumida en el país. El origen de esta
asociación tiene un origen muy particular y significativo en el que se
entrelazan las costumbres con los discursos del país de principios del siglo
XX.
En 1911 la empresa
Bavaria sacó al mercado una nueva marca de cerveza de bajo costo llamada ‘La
Pola’, cuya etiqueta tenía una imagen alegórica a Policarpa Salavarrieta. Dicho
lanzamiento se haría justamente un año después de la celebración del primer
centenario de la independencia y se trató de un gesto que fue descrito por la
prensa de la época “como un notable gesto patriótico” en el que se realizó un
homenaje a tan distinguida mártir de la patria.
Es importante aclarar
que, según registros, existía toda una estrategia de mercadeo para favorecerse
del pensamiento y las políticas públicas de la generación del centenario, pues
se trataba de una campaña que buscaba sustituir las costumbres en las clases
populares.
En la publicidad de
la prensa de esos años se mencionaba que esta cerveza era “un halago para los
consumidores y un alivio para las clases pobres”, pues se creía que gracias a
ella ahora podían tomar una muy buena y nutritiva cerveza.
Para ese entonces la
chicha estaba entre lo más consumido en los sectores populares, por eso esta
bebida fermentada de maíz era tradicionalmente la de mayor importancia en el
centro del país desde tiempos prehispánicos. Probablemente la misma Policarpa
Salavarrieta la consumía, pues eran las chicherías los espacios por excelencia
de reunión para todos aquellos que luchaban por la causa independentista.
No obstante, la producción,
el consumo y la comercialización de la chicha siempre generó desconfianza entre
las autoridades y las élites dirigentes y por eso se produjo todo un discurso
alrededor de la relación entre el consumo de esta bebida y las problemáticas de
violencia y atraso de las clases menos favorecidas.
Los gobiernos
conservadores de la época llevarían a cabo toda una serie de medidas que
regularían su consumo con publicidad enfocada en los riesgos de higiene y en la
salud pública.
Es por esto que la
cerveza jugó un papel clave en la paulatina sustitución de la chicha como
bebida de consumo masivo y la historia comprobaría también que esta última no
era la principal causa de las problemáticas sociales.
La marca de cerveza
'La Pola' solo se siguió comercializando por unas décadas más, pero su nombre
perdurará de esta manera insertado en el argot de la cultura popular
colombiana.
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Pregunta 2: ¿Qué
ocurrió realmente durante la navidad negra en la ciudad de Pasto?
Uno de los episodios
más trágicos ocurridos en la ciudad de Pasto -y poco conocidos de la historia
nacional- fueron los sucesos vividos en diciembre de 1822, conocidos como la
‘navidad negra’. Se originaron en respuesta a la resistencia del pueblo pastuso
al proyecto político y social de la naciente república en cabeza del libertador
Simón Bolívar.
Esta población se
identificaba con la figura de la corona española, especialmente porque en
aquella región la monarquía había respetado los distintos resguardos
favoreciendo el arraigo en sus habitantes, además de profesar gran devoción al
catolicismo.
Los pastusos
resistieron a los distintos procesos independentistas, derrotaron ejércitos y
capturaron a Antonio Nariño en 1814. El conocimiento de su territorio, el valor
y compromiso de sus habitantes y la quebrada geografía fueron determinantes
para el éxito hasta ese momento del proceso de resistencia pastuso.
Por eso, Bolívar
declaró: “Esta vez será la última de la vida de Pasto: desaparecerá del
catálogo de los pueblos si sus viles moradores no rinden sus armas a Colombia
antes de disparar un tiro”.
La firmeza con la que
el pueblo se aferraba a sus principios era manifiesta, pero a la vez esta
convicción enfurecía a Bolívar a tal punto de llamarlos ‘demonios’. Fue así que
ordenó a sus tropas, al mando del Mariscal Antonio José de Sucre, atacar la
ciudad y a sus habitantes sin importar consideraciones.
El 22 de diciembre de
1822 los ejércitos “libertadores” entraron a la ciudad aprovechando que esta se
encontraba en las vísperas de la celebración de la navidad y por ello la
oposición que encontrarían seria mínima.
Los resultados fueron
devastadores ya que por tres días consecutivos estos ejércitos cometieron toda
clase de vejámenes contra la población como violaciones, saqueos e incendios
que consumieron la ciudad. Las víctimas se contarían por cientos incluyendo
mujeres, ancianos y niños.
El líder de este
movimiento rebelde conocido como Agustín Agualongo fue detenido y conducido a
la ciudad de Popayán para ser fusilado, su valor y compromiso por la causa
estuvo firme hasta el último momento de su vida.
Pregunta 3: ¿De dónde
viene la tradición de las novenas bailables al estilo colombiano?
La novena de
aguinaldos se ha configurado como una de las tradiciones más importantes en la
sociedad colombiana durante esta época del año, lo que tal vez no sabes es que
la mayor parte de su lenguaje y contenido se han conservado con muy pocas
modificaciones a través del tiempo.
Esta es la razón por
la que términos como el ‘padre putativo’, ‘el Emanuel preclaro’ y ‘el doliente
amparo’ aunque son desconocidos para gran parte de la población, aún siguen
vigentes en el tiempo gracias a esta tradición.
Los conjuntos de
oraciones, estribillos y peticiones que la componen surgen en el siglo XVIII y
se debe a Fray Fernando de Jesús Larrea, natural de Quito (razón por la cual
esta tradición también es celebrada en Ecuador). Para mediados del siglo XVIII,
elaboró la mayor parte de su contenido, siguiendo las costumbres de los
novenarios establecidos por la iglesia católica para las principales
celebraciones y conmemoraciones de su santoral y el calendario eclesiástico.
La novena que hizo el
franciscano Fernando Jesús Larrea fue publicada por primera vez en 1784 en la
Imprenta Real de Santafé. Uno de los primeros cambios que tuvo fue hecho por la
religiosa María Ignacia, en la Bogotá del siglo XIX, incluyendo algunos elementos
como los hilarantes y melódicos gozos.
La celebración de la
navidad y todas las tradiciones que la acompañan se fueron convirtiendo en un
lugar común para salir de la monotonía e inclusive ante las adversidades ya que
eran frecuentes las treguas durante este periodo en las innumerables guerras civiles,
además de producirse jubileos o amnistías temporales a ciudadanos procesados o
condenados.
La realización de las
novenas en pueblos, villas y ciudades se llevaban a cabo en las plazas públicas
e incluían elementos netamente religiosos como rezar una cantidad de rosarios
hasta momentos festivos para dar lugar a la diversión. Se configuraban como
espacios en los que se entonaban cantos populares o se hacían bromas entre
vecinos, tradiciones que de una u otra forma perduran en la figura de los juegos
de aguinaldos.
La novena navideña se
fue configurando como un momento particular para la reunión de familias,
vecinas y toda clase de organizaciones sociales y por ello, aunque el carácter
religioso de la población colombiana ha decrecido en las últimas décadas, esta
tradición sigue teniendo una gran acogida al representar los valores presentes
o anhelados de la sociedad colombiana.
Pregunta 4: ¿Cali,
Medellín y Barranquilla siempre han sido los principales centros urbanos del
país?
El orden urbano tal
como lo conocemos hoy en día en nuestro país ha cambiado a través del tiempo a
causa de los procesos económicos, sociopolíticos y culturales. En la costa
caribe la urbe protagonista durante más de 300 años fue el puerto de Cartagena,
constituyéndose como uno de los enclaves comerciales más importantes de las
Indias.
La arquitectura de la
ciudad amurallada refleja el esplendor de la economía esclavista, donde además
era uno de los puntos clave de transito de la ‘Carrera de Indias’ o ruta que
llevaba la flota española compuesta de galeones como el de San José. De esta
manera, se transportaban todas las riquezas extraídas de las colonias
americanas hacia España y por el cual llegaban los productos y las noticias
provenientes de Europa.
Ese protagonismo
regional fue sustituido paulatinamente desde mediados del siglo XX por la
ciudad de Barranquilla, que gracias a su cercanía al río Magdalena -junto con
el desarrollo de la navegación a vapor y su posición estratégica- se fue
convirtiendo en el principal puerto del país.
Fue por eso que
recibió el apelativo de ‘Puerta de oro’, pues gran parte de los migrantes que
llegaron a Colombia asentaron comunidades representativas en esta ciudad: tales
como la sirio-libanesa, la judía y las provenientes de Europa. Esto la
convirtió en una urbe cosmopolita gracias el desarrollo comercial, financiero,
industrial y cultural.
Casos similares se presentaron
con Cali y Medellín, que también lograron gran parte de su desarrollo a partir
de mediados del siglo XIX, pese a ser fundadas durante el periodo de la
conquista española, Cali (1536) y Medellín (1616).
El protagonismo
regional en el suroccidente del país lo tuvo Popayán, mientras que en el
noroccidente fue Santafé de Antioquia, estas dos últimas ciudades serían las
más importantes en sus respectivas regiones por más de tres siglos. La primera
gracias a la producción de las grandes haciendas y la segunda por la
explotación de las minas de oro.
El declive de estas
economías coloniales de carácter básicamente extractivo fue evidente desde
finales de la época colonial, dichos centros urbanos fueron perdiendo también
su importancia: en el caso de Santafé de Antioquia, fue sustituida por la
imponencia de Medellín gracias a la economía cafetera, una acelerada
industrialización a principios del siglo XX la convertirían también en la
segunda ciudad más importante del país. En el de Popayán, que obtuvo relevancia
hasta finales del siglo XIX por sus élites en la dirección política,
paulatinamente quedó aislada de los principales circuitos comerciales debido al
protagonismo que fue tomando Cali por el impulso de la economía de los ingenios
azucareros, la industrialización y su fuerte actividad comercial.
Pregunta 5: ¿En serio, todo el proceso de independencia
empezó por un 'simple' florero?
El 20 de Julio de 1810
ha sido considerada en nuestra historia republicana como la fecha más
importante para el proceso de independencia de la corona española, inclusive
por encima de otros acontecimientos relevantes como la batalla de Boyacá, el 7
de agosto de 1819.
Esta fecha obedece no
solo a un gesto heroico por emanciparse del dominio español, sino que fue el
resultado de toda una serie de acontecimientos que se venían presentando en el
mundo hispanoamericano debido a la coyuntura política provocada por la invasión
napoleónica a la península ibérica y la abdicación de la monarquía española en
1808.
Su origen se puede
remontar a otras causas asociadas a los grandes cambios del siglo XVIII como:
la llegada de las ideas ilustradas, la circulación de prensa escrita y las
reformas borbónicas que centralizaron el control monárquico del establecimiento
colonial.
Las principales
autoridades del gobierno estaban en manos de españoles peninsulares en
detrimento de los criollos o hijos de españoles nacidos en América, también se
aumentó la carga tributaria de las colonias generando malestar en distintos
sectores de la población (como quedó demostrado con la rebelión de los
comuneros en 1781).
El 20 de Julio
obedece en primera instancia a la conformación de una junta de gobierno -tal
como se venía haciendo en todo el mundo hispánico- donde los criollos
aprovecharon para retomar su voluntad de tener un mayor peso en los órganos
políticos y militares de las estructuras coloniales y no obedecían como tal a
la proclamación de la independencia de la corona española. De hecho, la junta
de Santafé estuvo inicialmente integrada por el virrey español Antonio José
Amar y Borbón y en su acta de constitución conocida como 'Acta de
independencia' se ratificaba el apoyo y la fidelidad a su real y católica
Majestad Don Fernando VII.
No hubo tampoco como
tal un 'grito de independencia' y el incidente insistentemente reproducido en
textos escolares del florero de Llorente fue todo un pretexto de la elite
criolla para crear todo un ambiente de malestar popular aprovechando el enojo
popular hacia los funcionarios y españoles peninsulares o “chapetones”,
generando toda una presión para solicitar la conformación de un cabildo que
daría lugar a la ya mencionada junta de gobierno.
No obstante, el valor
de esta conmemoración se debe a que este fue el primer gran paso para el
proceso de independencia, ya que posteriormente se expulsaría al virrey español
y las distintas provincias fueron declarando su independencia absoluta de la
corona española.
PDT: no está de más
aclarar que cuando se habla del florero de Llorente no se hace referencia a lo
que actualmente conocemos como florero.
BIBILIOGRAFÍA
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