Tres plantas de
sacrificio animal fueron cerradas por las autoridades de salud en la ciudad de
Villavicencio, por no cumplir con las normas sanitarias para su funcionamiento.
El Instituto Nacional
de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), confirmó que el
establecimiento destinado para el sacrificio ilegal de aves tenía un promedio
entre 3 mil 500 a 4 mil 000 que era sacrificadas semanalmente en condiciones
lamentables.
En el operativo las
autoridades encontraron que estos lugares no contaban con agua potable, tenían
una gran deficiencia en la cadena de frío ante la falta de un sistema de
refrigeración para el producto, por lo que no eran aptos para el consumo humano
y ponían en riesgo la salud de los consumidores.
Las investigaciones
del Invima permitieron establecer que estas aves sacrificadas de forma
irregular pretendían ser comercializadas en Villavicencio, al igual que en los
municipios de Acacias, Guamal, San Martin y Granada en el Meta, y en el
Casanare.
“Las autoridades
seguiremos trabajando de manera articulada en contra del sacrificio animal
ilegal con el propósito de proteger la salud de los colombianos”, afirmó Javier
Humberto Guzmán, director del Invima.
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