Las labores de inspección y control fueron realizadas entre la Secretaría de Ambiente y la Empresa de Acueducto de Bogotá y se descubrió que el frigorífico “San Isidro” y la tintorería “Moda Color”, vertían desechos orgánicos e industriales, sin con contar con los permisos correspondientes.
El equipo técnico de
la administración distrital que se desplazó hasta el lugar identificó que en el
frigorífico se sacrificaban unas 200 cabezas de ganado diariamente y el
vertimiento de la sangre, luego del lavado, se hacía al alcantarillado, sin
tener permisos para ello y con residuos del sacrificio de los animales.
Esta práctica
irregular por parte del frigorífico, según la Secretaría de Ambiente, ocasionó
que esta red de recolección de desechos colapsara y pasara al sistema de agua
lluvia y posteriormente a la quebrada. Este tipo de actividades fueron
conocidas gracias a varias denuncias por parte de la comunidad.
En el otro caso se
logró establecer que en la tintorería, además de los vertimientos de material
industrial que contaminan la quebrada, generaba grandes emisiones de gases
tóxicos, debido a la operación de varios hornos y calderas, generando graves
problemas de salud para la comunidad.
Las autoridades
iniciaron los respectivos procesos sancionatorios contra ambos
establecimientos, por incumplir la normatividad ambiental, dichas empresas
tendrán que pagar multas hasta de 3.600 millones de pesos.
En lo que va corrido
de este año, la administración distrital ha ordenado la suspensión de
actividades en 18 establecimientos que generaban altos índices de
contaminación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario